¿Sabes si tu sindicato defiende la enseñanza concertada? CGT te lo cuenta porque no tiene ningún conflicto de intereses, ya que defiende un único sistema educativo: la escuela pública
Hace años que CGT alertó de que con el descenso de la natalidad y el blindaje de la concertada se produciría la eliminación de grupos escolares, comenzando por Infantil y Primaria y progresivamente subiendo hasta Educación Secundaria. CGT lo demostró con el análisis de los datos de los organismos públicos. Hoy los datos son claros y muestran que teníamos razón. En Infantil, la escuela pública ha perdido 3515 unidades en 11 años y la concertada ha ganado 1405 en estas etapas más tempranas. Esta tendencia ya se ha iniciado en la ESO: el curso pasado se cerraron 66 unidades. Esto es el principio. Los datos apuntan a que, si no se apuesta únicamente por la pública y se reducen las ratios, se perderán más de 2.000 unidades en la ESO en los próximos años.
Esta situación hace más importante, si cabe, la convocatoria de elecciones del jueves 1 de diciembre, porque en ella se decidirá quién estará en la Mesa Sectorial defendiendo a la Educación Pública. Y es cierto que todos los sindicatos dicen defenderla, pero algunos tienen un conflicto de intereses porque no solo están en las Mesas Sectoriales en las negociaciones sobre la pública con la Consejería de Educación. Algunos sindicatos también están en las Mesas Sectoriales ante la Consejería defendiendo la concertada, y basta mirar el BOJA y el BOE para comprobarlo.
Los conciertos con la enseñanza privada están regulados por una norma negociada con las organizaciones patronales, de titulares y sindicales representativas en el ámbito de la enseñanza concertada. El último acuerdo que encontramos en el BOJA (hay muchos anteriores) es la Orden de 16 de diciembre de 2020, por la que se establecen las normas de las convocatorias para acogerse al régimen de conciertos educativos en las Enseñanzas de Educación Infantil, Educación Especial, Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato y Formación Profesional, desde el año académico 2021/20222 hasta el año académico 2024/25.
¿Qué sindicatos han negociado y siguen negociando en defensa de los conciertos con la enseñanza privada y han conseguido que, de facto, se blinden las unidades de la concertada y se deje a su suerte a la Pública? La respuesta está en el BOE. En la Resolución de 5 de mayo de 2022, de la Dirección General de Trabajo, por la que se registran y publican los Acuerdos de aprobación de las tablas salariales para el año 2022 y la modificación del VII Convenio colectivo de empresas de enseñanza privada sostenidas total o parcialmente con fondos públicos. Y, como una imagen vale más que mil palabras, aquí está la prueba:
¿Qué ocurre cuando en la Enseñanza Privada no les gusta alguna condición de los conciertos? Salen en su defensa la patronal de la privada y esos sindicatos y, si hace falta, se van a los juzgados y denuncian a la Administración Pública.
¿Qué ocurre cuando en la Educación Pública se cierran unidades habiendo niños en la zona a los que atender? Pues que únicamente los sindicatos pueden luchar para que eso no ocurra, ya que la Administración no se denuncia así misma ante ningún juzgado.
¿Y qué hacen los sindicatos en esas situaciones? Pues como todos no son iguales no hacen lo mismo. CGT llevaba años alertando de que esto se iban a cerrar unidades de la pública por la bajada de la natalidad y el blindaje de la concertada, y luchando para evitarlo. También lleva años pidiendo la bajada de las ratios para mejorar la calidad de la enseñanza pública y evitar el cierre de unidades.
Sin embargo, otros sindicatos que dicen defender a la pública, pero también defienden a la concertada (como acabas de comprobar), tienen un conflicto de intereses. Y ante ese dilema, ¿hacen realmente todo lo posible para defender a la pública o son cautos por no enfadar a sus afiliados de la concertada?
En todo ese debate, además se introduce una idea que pretende dejar en mal lugar a la Educación Pública pero que, en el fondo, a quien deja muy mal es a quienes gobiernan y gestionan lo público. Con frecuencia se dice que el cierre de unidades públicas se produce porque las familias eligen y eligen la concertada. Es decir, que la culpa la tiene el profesorado de la pública, que trabaja menos y enseña peor que los de la concertada (aun habiendo tenido que pasar por oposiciones para demostrar su competencia profesional). Sin embargo, esto no se sostiene si vemos que hay zonas enteras, especialmente en las grandes poblaciones, en las que no hay centros educativos públicos que elegir; que la matriculación se hace más por zona de residencia que por elección de centro público o privada; y, sobre todo, porque los recursos que la administración pública asigna a los centros públicos son inferiores a los que concede a la concertada. CGT ha demostrado esto reiteradamente con datos con muchas cuestiones diferentes, como por ejemplo, la inferior dotación a la pública de personal administrativo, de conserjería y limpieza, lo que tiene graves consecuencias en el funcionamiento de los centros educativos y en la gran sobrecarga de trabajo de los equipos directivos, que acaban haciendo funciones de administrativos y de conserjería. Puedes verlo en:
«¿Qué pasa con el PAS?» Mientras el Personal de Administración y Servicios disminuye progresivamente en la pública, crece en la privada concertada.
Por todo esto, te pedimos que votes a CGT, porque todos los sindicatos no son iguales. Nosotros solo defendemos la pública (no tenemos afiliación de la concertada porque tienen clarísimo qué modelo educativo defendemos). Nosotros creemos que la educación pública es la única que puede luchar contra la desigualdad y construir una sociedad con una mayor igualdad de oportunidades. En CGT creemos en el profesorado de la educación pública y luchamos por él.