Como si de un mal endémico se tratase, la falta de personal de administración y servicios (PAS) en los centros educativos andaluces es un clásico. Colegios, institutos, conservatorios, escuelas de arte… ninguno se libra. Si tu centro es uno de ellos, escríbenos para que lo denunciemos.
Nuestro sindicato ha denunciado ante la Delegación Territorial de Educación que persiste la falta de personal de administración y servicios en el IES Murillo, sito en la calle José Recuerda Rubio, 6, 41018, Sevilla.
Dicha circunstancia no es nueva sino que se da desde hace mucho tiempo. La misma la notificó el Equipo Directivo a la Delegación en su día.
Se trata de un centro con 1794 estudiantes, por lo que su volumen de matriculación y de gestiones administrativas es muy elevado. La asunción de estas tareas en otro tiempo ha tenido que ser asumida por parte de la Secretaria y de un ordenanza, lo cual suponía una sobrecarga inasumible y la dedicación de un tiempo que esas personas deberían emplear en llevar a cabo sus funciones respectivas. Tras casi un año en esa situación, se incorporó una administrativa en mayo y otro en septiembre. No obstante, resulta insuficiente.
La RPT del instituto consta de:
-3 personas funcionarias administrativas.
-1 persona laboral administrativa.
-2 personas funcionarias de oficios varios.
-5 ordenanzas.
-5 personas de limpieza.
Hacen un total de 16.
De esta relación, hay 5 puestos que no se cubren:
1 persona funcionaria administrativa, 1 persona laboral administrativa, 2 personas funcionarias de oficios varios y 1 ordenanza. Así, con el 68,75% del total del personal se está haciendo el trabajo como si se estuviera al 100% o más. Es muy importante señalar que la relación de puestos de trabajo no está actualizada. En el curso 2009/10, por ejemplo, el alumnado matriculado sumaba 902. Si en 2021 dicha cantidad es el doble, no tiene sentido que el personal sea casi un tercio menos de lo que indica la RPT. Además, se da la circunstancia de que hasta hace unos años las dependencias propiamente del instituto eran mucho menores, puesto que aproximadamente la mitad del edificio era de uso de la Universidad de Sevilla. Así, si la Hispalense tenía contratadas a dos personas de limpieza, cuando dichos espacios pasaron a formar parte del instituto la dotación de este personal no aumentó, ampliándose considerablemente su carga de trabajo. Resulta incomprensible que no se destinasen, como mínimo, dos personas más para la limpieza del centro.
A un centro que acoge enseñanza secundaria, ciclos, semipresencial y —tras el desmantelamiento del IEDA— educación a distancia, además de llevar la gestión administrativa de 4 centros concertados (San Bernardo, Santa Joaquina de Vedruna, Salesianas de Nervión y Padres Blancos), tenerlo infradotado es inconcebible. Asimismo, en el IES Murillo se imparte el That´s English, se realizan todos los años las pruebas libres de Bachillerato y es siempre sede de tribunales de oposiciones. Todo, con mucho menos personal del que le correspondería.
Por las características particulares de este instituto, con horario lectivo de 8:00 a 14:30 y de 16:00 a 22:15 horas (hay que sumar tiempo de apertura del mismo antes y después de dichos periodos), en una hora y media se han de limpiar unas 40 aulas. Si a esto añadimos las circunstancias del COVID, que recomiendan tener abiertos y en uso todos los servicios del centro, por motivos de salud e higiene, lo que debe abarcar el personal de limpieza es excesivo. La saturación y sobrecarga derivan desgraciadamente en lesiones y, en ocasiones, en bajas. Que la Administración tiene que velar por la salud de su personal no puede ser una frase hecha sino una realidad.
Por todo lo expuesto, desde CGT exigimos que se tomen las medidas oportunas para la cobertura de dichos puestos con carácter urgente.