Parece una broma, pero no lo es. La Consejería de Educación y Deporte de Andalucía llegó a un acuerdo de colaboración público-privada, en mayo de 2021, para la implantación del Proyecto FES, un programa que incluye charlas en los institutos de “formación, educación y sensibilización” sobre adicciones y ocio. Dicho proyecto, dirigido al alumnado de ESO, FP, Bachillerato y a sus familias, está impulsado, nada más y nada menos, por la Plataforma de Juego Sostenible, de la que forman parte las mayores empresas de juego presencial que hay en España.
Los lobos no cuidan de las ovejas
La Federación Andaluza de Jugadores de Azar en Rehabilitación (FAJER) no da crédito. Denuncia que la consejería no ha querido contar con su participación ni opinión a la hora de diseñar el proyecto. Desde el colectivo, aseguran que solo fueron informados del acto de presentación del programa, en un instituto de Sevilla que tiene una casa de apuestas a escasos metros. “No podemos decirles a los jóvenes que jueguen desde la responsabilidad”. “Que hagan lo que quieran con su responsabilidad social corporativa, pero podrían dedicarse a otra cosa que ir a los institutos. Creo que es muy preocupante intentar limpiar la imagen a costa de la educación pública y de nuestros menores”, ha declarado su portavoz.
Un chiringuito para el Hermano Mayor
¿Qué necesidad había de un nuevo proyecto? Javier Imbroda justificaba así el acuerdo: “a través de este proyecto se animará al alumnado a reflexionar sobre cuestiones como cuánto tiempo de ocio pasan al día delante de una pantalla o si realmente son ellos mismos en esos momentos de ocio digital, y a contribuir a que su actividad en las redes sociales se haga con responsabilidad, sensatez y respeto, combatiendo el ciberbullying”. Sin embargo, dentro del Programa Hábitos de Vida Saludable en la modalidad de Forma Joven ya existen recursos y materiales para el Uso positivo de las TIC y la Prevención del Consumo de Sustancias Adictivas. Por eso es especialmente llamativo que hayan creado ex profeso este proyecto, contratando como embajador a Pedro García Aguado, exdirector general de Juventud de la Comunidad de Madrid.
Consejería de Educación, Juego y Deporte
El proyecto aspira a informar y educar desde las evidencias científicas y no moralistas. Eso indica un apartado de la web de la plataforma dedicado a “creencias erróneas sobre el juego”. Entre estas incluye como falsedades que los locales de juegos se instalen, principalmente, en barrios humildes o que la proximidad de los mismos a los institutos afecte a los menores. En su defensa, se atreven a decir que al alejar estos locales de los centros escolares o de zonas pobladas de las ciudades lo que se consigue es invisibilizar esa realidad, que comparan con los botellones o la prostitución.
Con el cinismo que caracteriza al consejero, un mes después de la aprobación de este proyecto, respondió así a una pregunta parlamentaria: «¿La responsabilidad quién la tiene aquí? ¿La tiene una administración? ¿Las familias no tienen responsabilidad en esto? ¿Los jóvenes que puedan optar por esto no tienen responsabilidad? Aquí siempre estamos delegando las responsabilidades de unos en otros. ¿Nadie es responsable de sus actos? ¿Nadie?». Sí, señor consejero: el responsable es usted. No lo olvide. Con la educación no se juega.