CGT mantiene que el concurso de méritos es inútil y que no solo no soluciona el problema de la estabilidad sino que lo enquista aún más.
Actualmente, en Andalucía hay 37000 docentes interinos contratados (el 35% del total de docentes) según el censo electoral de diciembre facilitado por la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional.
La oferta de plazas de estabilización del gobierno andaluz para este personal interino docente es de un total de 6113 para los dos procesos que se han convocado (concurso de méritos y concurso oposición extraordinario).
Según estas cifras, el proceso solo «estabilizará” al 16,5% de la interinidad actual en Andalucía y hay que tener en cuenta que muchas de esas plazas pueden ser adjudicadas a docentes de otras comunidades.
Al finalizar este proceso de desestabilización quedarán en Andalucía más de 30000 docentes trabajando en situación de interinidad (cerca del 30% de la plantilla). La normativa obliga a tener una tasa de interinidad no superior al 8% antes de final del 2024.
Si comparamos este proceso de estabilización con el de Cataluña, una comunidad que se nos aproxima en número de profesorado y tasa de interinidad, se puede apreciar este desfase:
PLANTILLA DOCENTE | PLAZAS DE ESTABILIZACIÓN | TASA FINAL DE INTERINIDAD | |
CATALUÑA | 83947 | 27105 | 8% |
ANDALUCÍA | 106458 | 6113 | 30% |
Cataluña ha convocado 27105 plazas de estabilización pese a tener una plantilla docente muy inferior, ¡21000 plazas más que en Andalucía! Un ajuste proporcional a las plazas ofertadas en Cataluña exigiría que Andalucía hubiera convocado unas 30000 plazas para reducir la tasa máxima de interinidad al 8%.
El análisis de estas cifras evidencia la gran estafa al colectivo interino que está realizando la Junta de Andalucía con las escasas plazas convocadas.
CGT ha denunciado este hecho ante los tribunales que, como venimos diciendo, tendrán que resolver si la administración educativa ha escondido miles de plazas estructurales que deberían haber sido incorporadas a este proceso extraordinario según marca la ley.
Esto se evidenciará todavía más cuando, al finalizar este proceso de estabilización en 2024, la tasa de interinidad siga incumpliendo con creces la tasa máxima del 8% determinada por la normativa, ya que las plazas convocadas en 2023 para procesos de oposición libre son más que insuficientes y solamente cubren la tasa de reposición. Veremos entonces qué argumentos utiliza la administración…
¿Tendrán algún plan secreto para reducir la tasa de interinidad al 8%? ¿Permitir la incorporación de profesorado contratado por empresas privadas en los centros públicos al igual que se pretende hacer en Sanidad? ¿Cerrar miles de unidades educativas en secundaria como sigue haciendo en primaria y dejar en la calle a miles de docentes?
¿Desplazar y desterrar a otros tantos miles de personas en situación de interinidad? ¿Convocar más de 15000 plazas en procesos de oposición libre en 2024? ¿Seguir privatizando la educación aumentando todavía más recursos y profesorado destinados a centros privados concertados?
Habrá que preguntarle a Nostrasladamus, que va a ser, sin lugar a dudas, el nuevo profeta del colectivo interino…