Una treintena de activistas de CGT procedentes de distintos puntos de la geografía española han ocupado esta tarde los terrenos de Botafuegos donde el Gobierno proyecta construir un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE).
Hasta el lugar se han desplazado miembros del sindicato procedentes de distintos puntos de Cataluña, Aragón, Madrid y Andalucía, y han ocupado con tiendas de campaña el solar cedido por el Ayuntamiento de Algeciras al Ministerio del Interior para la construcción del CIE.
El secretario general de CGT Andalucía, Miguel Montenegro, ha afirmado que lo que queremos es denunciar la futura construcción del CIE en Algeciras y a gritar alto y claro que no queremos más fronteras, más presos inocentes y más muertes en cárceles inventadas como lo que ha pasado en el CIE de Archidona en Navidad.
Este es el primer acto que pretendemos hacer de denuncia pública y como CGT vamos a seguir poniendo todos nuestros medios para que el nuevo CIE, estas prisiones de marca blanca, no se sigan instalando en nuestro territorio, ha señalado Montenegro.
Durante el acto se ha leído un manifiesto conjunto que ha expresado el sentir y el objetivo de la ocupación de los terrenos:
Hoy y aquí volvemos a encontrarnos para reconocernos y manifestar públicamente sentimientos y pensamientos de hermandad, de solidaridad, de respeto profundo por los derechos humanos, por los derechos de todas las personas, hayan nacido donde hayan nacido, vengan de donde vengan.
Utilizar las energías de las buenas personas para reprimir, para reducir a otras es uno de los mayores delitos contra la humanidad. Pedir la confianza de un pueblo para, en su nombre, maltratar a cientos de miles es de canallas.
Por ello manifestamos lo siguiente:
-Nos negamos a invertir dinero para privar de libertad a personas que tratan de entrar en Europa por el único sitio que pueden hacerlo. Los políticos no crean cauces legales, por donde el caudal de esperanzas e ilusiones que traen tantas criaturas desde África pueda regar los campos de esta Europa, que se dice cuna de las democracias.
-Nos negamos a que las instituciones públicas creadas con el esfuerzo de este pueblo trabajador generen, contra personas que lo único que buscan es mejorar sus condiciones de vida, una VIOLENCIA INSTITUCIONAL inmensa.
-Cifras impresionantes de emigrantes son conocidas públicamente y los recursos precisos para atenderlas son exiguos, invirtiéndose mucho más en la represión que la atención humanitaria. El Jefe del Centro de Coordinación de Salvamento marítimo de Tarifa contaba el 29 de enero en Europa Sur que se han multiplicado por tres el número de asistencias y no han aumentado los recursos para Salvamento marítimo. No existe una red de acogida y a los políticos no les importa dejarlas a la intemperie una vez llegan a estas costas después de sortear múltiples obstáculos, donde muchos han dejado sus vidas.
-Ven el negocio de la construcción de 20 mil metros cuadrados para retener a las personas, cuando esos terrenos esperan iniciativas productivas que generen empleo y riqueza social. 20 millones de euros que en lugar de dedicarse a la ruin finalidad de encarcelar deben servir para construir esperanza y futuro de vida digna para todas y todos
– No queremos que Algeciras sea un parque temático de privación de libertad: Una macro-cárcel llena de delincuentes y vacía de corruptos y defraudadores, un centro de menores infractores (Marchenillas) y un Centro de Internamiento (encarcelamiento) de Extranjeros, mientras todo este territorio no cuenta con instalaciones de acogida y atención, no sólo de personas extranjeras, según ellos, sino de las propias residentes con claras necesidades sociales. Urge construir albergues, residencias de mayores, centros de salud
-Queremos ser lo que debe ser cualquier espacio habitado por seres humanos: una ciudad abierta, amable, acogedora donde la dignidad humana prime por encima de todo.
– Queremos acciones humanitarias y solidarias que se concreten en inversiones públicas que salve vidas y permitan que estas transcurran dignamente.