El pasado 20 de noviembre, los sindicatos ANPE, CSIF, USO, representantes del profesorado de Religión, se reunieron con la Viceconsejera de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía, Marta Escrivá. La Viceconsejera anunció a las organizaciones sindicales presentes que la Consejería de Presidencia, Administración Pública e Interior ha solicitado al Ministerio de Educación y Formación Profesional que se inicien los trámites para que se transfieran las competencias educativas del profesorado de Religión de Infantil y Primaria a la Junta de Andalucía, a la mayor brevedad posible.
Al Gobierno andaluz no le basta con arrinconar las Humanidades, dar más horas a la Religión y pagar con dinero público a profesores elegidos a dedo por la Conferencia Episcopal que defienden la existencia de fenómenos sobrenaturales. No, ahora además quiere asegurarse de que estos adoctrinadores permanecen en el sistema público de enseñanza mediante el blindaje de sus privilegios.
El matrimonio entre la derecha y la Iglesia es ancestral en este país, pero desde CGT no nos cansamos de expresar nuestro rechazo a la presencia de la religión en los centros educativos públicos.
No al esoterismo en las escuelas.
Por una enseñanza laica, pública y de calidad.