El 22 de marzo de 2005 se aprobó el Plan de Fomento del Plurilingüismo en Andalucía, que incorporaba la apuesta por impartir el idioma extranjero en materias no lingüísticas: traducido al idioma de la AGAEVE es una apuesta para la adquisición de la competencia en lengua extranjera mediante su contextualización en las áreas humanísticas y científico-tecnológicas con la metodología AICLE (Aprendizaje Integrado de Contenidos y Lenguas Extranjeras). Lo que conllevó la formación y actualización lingüística de un alto número de docentes que se sumaron a este proyecto. En la actualidad, la creación de centros bilingües y plurilingües en la Comunidad Autónoma de Andalucía ha ascendido a 1.417 centros, donde se imparte enseñanza bilingüe a 460.975 alumnas y alumnos andaluces.
Estos datos están extraídos del informe sobre la educación bilingüe en Andalucía elaborado por la AGAEVE y la Universidad Pablo de Olavide, y recientemente publicado (enero de 2019).
Este plan ha tenido importantes repercusiones en el sistema educativo andaluz, que para el mencionado informe son todas positivas, por cierto. Sin embargo, dicho informe parece más un folleto publicitario para dar “recomendaciones” de cómo vender las bondades del programa bilingüe que un estudio riguroso de los efectos reales que este programa está teniendo en el sistema educativo andaluz; eso sí, con innumerables gráficos a todo color marca de la casa, que lejos de aclarar contribuyen a que nos perdamos en un verdadero océano de datos estadísticos y gráficos.
Frente a este discurso triunfalista, desde CGT venimos manifestando nuestras dudas sobre los presuntos efectos positivos de dicho plan. Estudios realizados en Comunidades donde la implantación del llamado bilingüismo es más avanzada, como Madrid, empiezan a mostrar cómo está contribuyendo a aumentar la desigualdad y empeorar el aprendizaje en las materias no lingüísticas impartidas en inglés.
Pero la necesidad de analizar rigurosamente los efectos del llamado “bilingüismo” en el sistema educativo andaluz se hace ahora aún más urgente ante la pretensión del nuevo gobierno andaluz del PP y Ciudadanos con el apoyo de la extrema derecha de VOX de generalizar el bilingüismo a todos los centros educativos andaluces. Nos parece irresponsable que este plan se haya implantado y ahora se pueda generalizar a todo el sistema educativo sin haberse realizado un estudio serio de sus repercusiones.
Desde CGT queremos contribuir modestamente a fomentar el debate sobre los efectos del llamado bilingüismo en el sistema educativo andaluz. Para ello, queremos compartir con la comunidad educativa, en especial con las familias, los aspectos que más nos preocupan, elaborando una encuesta para detectar las repercusiones que su implantación está teniendo en los centros educativos y prever las posibles consecuencias que su generalización a todos los centros tendría en el conjunto del sistema educativo andaluz.
Algunas dudas para empezar
- El llamado “bilingüismo” se ha presentado como la solución al problema del fracaso en el aprendizaje de idiomas en nuestro país, especialmente del inglés. El objetivo es loable, ¿pero es realmente la mejor opción para conseguir ese objetivo? ¿Es imprescindible impartir materias no lingüísticas en otros idiomas? ¿No hay otras alternativas? ¿No se podría, por ejemplo, reforzar el aprendizaje de los idiomas en la propia materia de la lengua extranjera, con una mayor presencia de lectores nativos o más programas de inmersión lingüística?
- ¿Lo llaman bilingüismo y no lo es? El llamado plan de bilingüismo, a pesar de su nombre, no deja de ser simplemente un sistema de refuerzo de un idioma extranjero, al no basarse en profesorado nativo ni existir una verdadera inmersión lingüística. ¿No es esto, en cierta medida, un uso propagandístico del mismo?
- ¿Por qué el programa de bilingüismo ha supuesto un negocio para empresas privadas (y un costo para las familias) como el Trinity College y la Universidad de Cambridge o sus equivalentes en otros idiomas?
- ¿Qué consecuencias tiene dentro de nuestro ámbito laboral el plan de bilingüismo? Y, sobre todo, qué consecuencias tiene para el alumnado. ¿Ha contribuido a la segregación del mismo? ¿Empeora los resultados en las materias no lingüísticas?
- ¿Se han estudiado las consecuencias de esta política lingüística en nuestro sistema educativo? ¿Qué supone para una cultura de una sola lengua materna usar dos lenguas vehiculares en sus escuelas e institutos? ¿Qué consecuencias puede tener si consideramos que la lengua materna es clave para la transmisión cultural?
(Continuará)
Lee aquí «El vil lingüismo (II)» y «El vil lingüismo (III)».