Desde CGT nos alegramos de la sentencia del TJUE aunque las expectativas que había levantado no parecen corresponderse con el fallo.
Miles de empleados públicos temporales llevaban 2 años esperando esta sentencia sobre el caso de cuatro odontólogas y un informático del Servicio Madrileño de Salud.
El TJUE concluye que la Administración Pública ha llevado a cabo contratos temporales abusivos y deja la pelota en el tejado de los tribunales españoles para que acuerden las sanciones que consideren adecuadas y disuasorias, entre las que caben: convertir a los interinos en indefinidos no fijos o concederles una indemnización.
Reproducimos un extracto de la sentencia:
Habida cuenta de las consideraciones anteriores, procede responder a la séptima cuestión prejudicial en el asunto C-103/18 y a las cuestiones prejudiciales segunda, tercera, cuarta, sexta y séptima en el asunto C-429/18 que la cláusula 5 del Acuerdo Marco debe interpretarse en el sentido de que incumbe al órgano jurisdiccional nacional apreciar, con arreglo al conjunto de normas de su Derecho nacional aplicables, si la organización de procesos selectivos destinados a proveer definitivamente las plazas ocupadas con carácter provisional por empleados públicos nombrados en el marco de relaciones de servicio de duración determinada, la transformación de dichos empleados públicos en «indefinidos no fijos» y la concesión a estos empleados públicos de una indemnización equivalente a la abonada en caso de despido improcedente constituyen medidas adecuadas para prevenir y, en su caso, sancionar los abusos derivados de la utilización de sucesivos contratos o relaciones laborales de duración determinada o medidas legales equivalentes, a efectos de esa disposición.
En tanto la asesoría jurídica de CGT estudia cómo afectará exactamente dicha sentencia al personal interino de la educación pública andaluza, ya que puede abrir un horizonte nuevo de reivindicaciones, CGT seguirá defendiendo que