CGT junto a otras organizaciones sindicales y colectivos de la enseñanza pública realizan una jornada de lucha y reivindicación de la enseñanza pública.
Por la derogación de la LOMCE, contra los recortes, por la eliminación de las contrarreformas universitarias, por la estabilidad del personal interino, contra la privatización del sistema educativo, por la bajada de ratios y aumento de las plantillas, por la recuperación del sistema de becas, contra los recortes educativos,
Las políticas de recorte que el gobierno andaluz viene imponiendo desde mucho antes de la aplicación de la LOMCE, siendo en este sentido lamentables pioneros de este proceso de destrucción del sistema educativo público que ha provocado pérdida de plantillas docentes y derechos laborales; incremento de ratio especialmente en las grandes áreas metropolitanas; incremento de las horas lectivas del profesorado; retrasos y falta en las sustituciones del profesorado y del personal de administración y servicios; apoyo a la privatización de la enseñanza a través de la sobreconcertación; cierre de líneas en la pública; descenso brutal en los presupuestos de los centros educativos; cesión del personal que realiza actividades educativas a empresas privadas externalizadas; pérdida de recursos para atender al alumnado con problemas de aprendizaje; expulsión de numeroso alumnado de la educación superior.
Todo esto ha llevado a la comunidad educativa andaluza a decir basta.
Más de 30.000 personas en la manifestación de Sevilla. Centros como el de Huertor Santillan en Granada donde solo han acudido los servicios mínimos, centros en Sevilla donde solo ha acudido un profesor a su centro de trabajo, la UMA que ha quedado paralizada en Málaga y la universidad cerrada en Sevilla son claros ejemplos del hastío del colectivo de enseñanza de esta región. En muchos centros el total del alumnado no ha asistido a clase.
En infantil de 3 años ha habido mucha aceptación por esta huelga. Entre el profesorado de secundaria entre un 60 y 65% la han secundado.
Con una participación total entre el alumnado y gran afluencia del profesorado de primaria y secundaria, es hora de que tanto el gobierno central como el andaluz recapaciten y piensen hacia dónde llevan nuestro sistema educativo. Es el momento de revertir la situación actual y apostar por un sistema educativo único en el que tengan cabida todas las personas sin discriminación de ningún tipo.
CGT apuesta por un marco educativo creado por y para el sector educativo.